Cómo saber si tu corazón está envejeciendo más rápido de lo que debería
Nueva técnica de resonancia magnética permite conocer la verdadera edad del corazón y detectar señales tempranas de enfermedades cardíacas
Médicos deben detectar señales sutiles que podrían apuntar a una muerte por ataque al corazón en un futuro cercano. Crédito: BlurryMe | Shutterstock
Un equipo de científicos de la Universidad de East Anglia (UEA), en el Reino Unido, ha desarrollado una innovadora técnica que permite determinar con mayor precisión la edad funcional del corazón humano, utilizando una resonancia magnética simple. Esta herramienta, que los expertos califican como un cambio de paradigma, promete transformar la manera en que se detectan y previenen las enfermedades cardíacas.
La investigación, liderada por el Dr. Pankaj Garg, cardiólogo consultor en el Hospital Universitario de Norfolk y Norwich, busca ir más allá de los métodos tradicionales de evaluación cardiológica.
Según Garg, muchas personas podrían descubrir que su corazón es más viejo de lo que indica su edad cronológica, especialmente aquellas que sufren condiciones como hipertensión, diabetes u obesidad.
“No se trata solo de contar los años vividos. Ahora podemos ver con claridad cómo se comporta el corazón en función de su salud y no solo del tiempo”, explicó el investigador.
Para desarrollar esta técnica, el equipo analizó resonancias magnéticas cardíacas de 557 personas, de las cuales 191 eran completamente sanas y 366 presentaban una o varias afecciones cardiovasculares o metabólicas.
El objetivo era detectar diferencias sutiles en el tamaño, forma y fuerza de contracción de las cavidades del corazón, y con estos datos construir una fórmula que permita estimar su edad funcional.
Los resultados fueron reveladores. Mientras que los corazones sanos tendían a mostrar una edad funcional similar a la cronológica, en pacientes con enfermedades como diabetes o hipertensión, el corazón presentaba signos de envejecimiento prematuro.
En algunos casos, se detectaron diferencias de hasta una década. Por ejemplo, un paciente de 50 años con presión arterial elevada podía tener un corazón que funcionaba como el de una persona de 60.
Este hallazgo tiene profundas implicaciones para la medicina preventiva. Al detectar de forma temprana que un corazón está envejeciendo más rápido de lo normal, los médicos podrían intervenir antes de que aparezcan síntomas graves o irreversibles.
Las enfermedades del corazón siguen siendo una de las principales causas de muerte a nivel mundial
Además de ofrecer tratamientos adecuados, esta información puede motivar a los pacientes a modificar sus hábitos de vida: desde mejorar su dieta hasta aumentar su nivel de actividad física o seguir de manera más estricta los tratamientos prescritos.
“El envejecimiento acelerado del corazón no siempre se nota a simple vista ni en un chequeo común. Nuestra técnica de resonancia magnética brinda una visión interna clara y cuantificable del estado real del órgano. Esto puede marcar la diferencia entre la detección temprana y una emergencia cardíaca”, enfatizó el Dr. Garg.
El proyecto de investigación fue desarrollado en colaboración con instituciones médicas de Reino Unido, España y Singapur, y ha sido recibido con entusiasmo por la comunidad científica. Hosam Assadi, estudiante de doctorado e integrante del equipo de la UEA, destacó el potencial transformador de esta técnica.
“Hemos encontrado una manera eficaz de identificar corazones que envejecen antes de tiempo. Esto podría convertirse en una herramienta estándar en los chequeos de salud cardiovascular”, señaló.
Las enfermedades del corazón siguen siendo una de las principales causas de muerte a nivel mundial. La posibilidad de contar con una tecnología capaz de advertir sobre riesgos antes de que se manifiesten los síntomas representa una esperanza para millones de personas.
Esta nueva forma de leer el corazón no solo ayuda a los médicos a tomar decisiones clínicas más precisas, sino que también entrega a los pacientes una nueva oportunidad para cambiar su historia de salud.
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